Nuevamente, nos hemos puesto en contacto con la empresa debido a las numerosas quejas de la plantilla porque aún no están publicados los turnos en varios centros de trabajo.
Por un lado, queremos poner en valor que la empresa haya dado pasos en la buena dirección máxime, en un momento tan difícil para todos y todas y con muchos de nuestros compañeros aún trabajando desde sus domicilios debido a la situación generada por la COVID‐19.
No nos cabe ninguna duda, que nuestra reiterada insistencia sobre la necesidad de ir regularizando los turnos y libranzas para que se empezara a cumplir el Convenio, cuya negociación lideramos, ha contribuido significativamente, a que ya muchas de las tiendas, en concreto, el 76% de ellas, hayan regularizado sus turnos. Pero no es suficiente, tenemos que dar un paso definitivo y solucionar este asunto de una vez.
No obstante, somos conscientes de que la situación, aunque ha mejorado sigue siendo complicada a la hora de organizar los turnos y las libranzas, debido fundamentalmente a que no estamos toda la plantilla incorporada en nuestros centros de trabajo, gracias a las medidas negociadas durante la pandemia y que tienen como objetivo preservar la seguridad y salud de todos los que integramos TELYCO. Dicho esto, urge una organización de turnos y libranzas que posibilite la conciliación y el descanso de las personas trabajadoras.
Insistimos que seguiremos dedicando todos nuestros esfuerzos para lograr que el 100% de la plantilla tenga los turnos regularizados tal y como negociamos en el Convenio Colectivo.
No sólo es una cuestión de cumplir las normas, es una cuestión de salud ya que la actual situación podría tener efectos negativos en la plantilla de TELYCO a corto plazo y eso es algo que desde UGT no vamos a permitir.
UGT, ha propuesto a la empresa que en las tiendas donde la dificultad es mayor para confeccionar los turnos, se preste atención a las concurrencias.
No entendemos que un sábado con una sola persona sea suficiente para atender al cliente y al siguiente se requiera la máxima concurrencia. Si se puede, hay que hacerlo.
En otro orden de cosas, la empresa no tiene ningún reparo en continuar con la presión agobiante sobre la venta de alarmas y en la realización de llamadas, a la vez que ignora nuestros requeremientos y los de la plantilla a la hora de exigir el cumplimiento de nuestro convenio en materia de turnos y libranzas.
Las y los trabajadores tienen memoria, y saben cuándo agradecer y cuando quejarse. La solución está encima de la mesa y toca a la empresa dar los pasos para evitar la insatisfacción y el mal clima que genera la fuerte presión comercial y el no poner a disposición de la plantilla la planificación de su tiempo, tal y como exigimos.
